William Wilson (Edgar Allan Poe)
William Wilson es un cuento corto escrito por Edgar Allan Poe y publicado en 1839 en la revista Burton’s Gentleman’s Magazine. Es una de las Narraciones Extraordinarias del escritor. Este relato corto refleja algunas semejanzas del autor con el personaje principal, como nacer en el mismo día, aunque en diferente año. También coincide en la vida estudiantil de Poe en la cual no estaba muy centrado en los estudios sino más bien se dedicaba a divertirse, beber, jugar…. Es un relato narrado en primera persona, basado en el doble, que representa la conciencia del narrador. Aparece y desaparece en momentos de su vida que no son muy correctos. Tal vez para que reflexione de sus comportamientos sin mucho éxito.
Resumen de William Wilson
El narrador se presenta como William Wilson. Realmente no es su verdadero nombre. Cuenta que, desde muy niño, somete a su familia a sus caprichos y siempre se sale con la suya. Recuerda los años que pasó en el colegio. Se acuerda del director, que es también el cura al que ve en la misa y le parece una contradicción que esa persona parezca angelical cuando da la misa y se muestre rígida en las normas del colegio. Cinco años está allí. Describe el colegio como un lugar lúgubre y tenebroso.
Considera que destaca sobre todos los demás alumnos con una excepción: otro alumno con su mismo nombre y apellido (William Wilson). No pertenece a su familia pero se parece mucho a él, tienen la misma edad, la misma estatura… Lo tiene desconcertado, ya que compite con él en todo, en los deportes, en los estudios, le lleva la contraria… Le cabrea enormemente todo esto, porque no le permite sobresalir sobre los demás como quiere. No solo coinciden en el nombre y apellido, sino que también ingresan en el colegio el mismo día, por lo que los alumnos de más edad creen que son hermanos, esto último le perturba enormemente.
Tiempo después, cuando ya no está en el colegio, descubre que también ha nacido el mismo día del mismo año que William Wilson, el 19 de enero de 1813. Tienen una relación amor–odio. No se soportan, pero tampoco pueden pasar el uno sin el otro. Detecta un defecto en él, no puede alzar su voz por un problema en las cuerdas vocales, habla bajito y esto es una ventaja que el narrador aprovecha cuando puede para ponerse por delante de él. Su rival comienza a copiarle en todo, en su forma de vestir, de moverse, hasta imita su voz, en plan bajito, claro, pero lo imita.
Todo esto le encoleriza cada vez más. Una noche decide hacerle una broma pesada a su imitador. Va hacia su cuarto y lo ve profundamente dormido, pero se horroriza al contemplar lo que ve.
Después de ocurrir esto se marcha de la escuela del doctor Bransby. Pocos meses después, ingresa en el colegio de Eton. Aquí se desmadra completamente, bebe, juega, no hace caso a las normas…. Una noche cuando está de fiesta en su habitación con más compañeros, cuando el alcohol y otras cosas hacen mella en los cuerpos, un criado le anuncia que alguien pregunta por él en el vestíbulo. Llega tambaleándose al vestíbulo, ve a un joven, no distingue las facciones por la poca luz, pero se fija en que va vestido con una bata de casimir blanco, igualita a la que él lleva.
De pronto, esa persona se precipita hacia él y le susurra al oído: ¡William Wilson!. Y desaparece. De la impresión que le da oír ese nombre se le quita la borrachera de golpe. Empieza a hacer indagaciones sobre su doble y descubre que se marchó de la escuela del doctor Bransby el mismo día que lo hizo él por motivos familiares. Se olvida pronto de todo lo relativo a su doble y se centra en sus planes de ingresar en la universidad de Oxford, financiada su permanencia por el dinero de sus padres.
Ya en la universidad, se entrega a sus vicios. Se dedica a beber, jugar… Aprovecha sus habilidades ante el juego para desplumar a sus compañeros y así enriquecerse más. Y lo peor de todo es que sus compañeros lo idolatran, no cuestionan sus acciones, aunque esas acciones no sean muy adecuadas que digamos. Cuando lleva ya dos años en la universidad dedicándose a estas actividades, llega un nuevo compañero, Glendinning, un joven noble aparentemente rico. Se da cuenta de que se puede beneficiar de él, ya que lo considera, más bien, una persona simple. Lo convence para que juegue a las cartas.
Al principio, deja que gane algunas partidas, poco a poco va tejiendo su telaraña para que caiga en sus redes. Acuden al cuarto de un compañero (Preston) para jugar, concretamente juegan al ecarté. Vamos a hacer un inciso aquí. El ecarté es un juego de cartas en la que solo hay dos jugadores. Es un juego de descarte, en el que cada jugador coge cinco cartas que puede ir cambiando y gana el que primero haga cinco puntos. Empuja a Glendinnig para que apueste cantidades enormes.
A medida que transcurre la partida, Glendinnig se pone cada vez más nervioso, al perder tanto dinero entra en pánico. En ese momento entra en la habitación un desconocido y con un susurro acusa al narrador de hacer trampas. Les dice que registren el forro del puño izquierdo y los bolsillos de la bata. En el registro encuentran los pequeños paquetes de cartas. Al comprobar que es un tramposo, es humillado y expulsado de Oxford. Empieza a viajar por distintos países, visita París, Moscú, Viena, Berlín… Por donde va se encuentra con su imitador, que lo vigila y sabotea sus planes en repetidas ocasiones.
Huye constantemente, pero no puede librarse de él. Nunca puede ver su rostro. Comienza una lucha interna, se pregunta quién es esa persona, de dónde viene, qué quiere de él. No encuentra respuestas a esas cuestiones. Esto le desespera y se entrega completamente a la bebida. Comienza a resistirse al tormento de su acosador y descubre que cuando más se resiste, más disminuye el poder del que le atormenta. Esto le da esperanza para librarse definitivamente de ese control.
El Duque napolitano Di Broglio celebra en roma una fiesta de máscaras. Va allí y bebe más de la cuenta. Le irrita que haya tanta gente, solo quiere acercarse a la mujer de Di Broglio, pero le es difícil moverse entre las personas. Se enfurece al ser interrumpido por uno que lleva un disfraz idéntico al que él lleva. Lo conduce a una habitación adyacente para enfrentarse a un duelo. Lo hiere mortalmente, pero al apartar la mirada por un momento, se encuentra con un espejo donde ve su propia imagen cubierta de sangre.
Se da cuenta de que ha asesinado a su propio reflejo, que ahora habla con su voz y le advierte que, al matarlo, se ha condenado a sí mismo.
Personajes de William Wilson
William Wilson: Es el narrador y el personaje principal del relato. No es su nombre verdadero. Se describe como una persona caprichosa, que desde niño hace siempre lo que quiere. Su familia intenta en vano que sea una persona más responsable. Enredado en sus excesos y vicios, como el juego y la bebida, se deja llevar por sus impulsos violentos, como ocurre en el baile de máscaras al enfrentarse con su imitador. Tiene una personalidad paranoica al sentir que es perseguido constantemente por un doble.
El doble: El narrador lo llama William Wilson, el mismo nombre que se pone él, que no es el verdadero tampoco. Es un personaje misterioso y extraño. Aparece a lo largo de la historia coincidiendo en la vida del narrador. Su presencia y comportamiento, perturba enormemente al narrador, llevándolo a un estado de angustia extrema.
Otros personajes que aparecen en el relato de forma breve son:
Reverendo doctor Bransby: Es el director del colegio. Le produce una gran contradicción al narrador, ya que cuando da misa es una persona benevolente, pero cuando dirige el colegio es rígido con las normas. No entiende esa diferencia de formas de ser.
Glendinnig es compañero de clase. Es un joven, que aparenta ser muy rico, pero en realidad no lo es. El narrador lo considera débil y lo engatusa para aprovecharse de él.
También aparece otro compañero de clase Preston y el Duque Di Broglio que organiza una fiesta de máscaras donde se produce el desenlace de la historia.